Hoy queremos compartir con vosotros toda la información referente al PSA, un indicador diferencial ante un posible diagnóstico positivo de cáncer de próstata. Los varones que acuden regularmente a su urólogo, seguramente estén familiarizados con el término pero, en cualquier caso, siempre es un buen paso comenzar por la definición de lo que estamos tratando.
El antígeno prostático específico o PSA es una sustancia proteica sintetizada por células de la próstata. Su función es la disolución del coágulo seminal. Una pequeñísima parte de este PSA pasa a la circulación sanguínea de hombres enfermos, y es precisamente este PSA que pasa a la sangre, el que se mide para el diagnóstico, pronóstico y seguimiento del cáncer y otros trastornos de la próstata, como la prostatitis.
Los niveles normales en sangre de PSA en los varones sanos son muy bajos, del orden de millones de veces menos que en el semen, y se elevan en la enfermedad prostática. Los valores de referencia para el PSA sérico varían según los distintos laboratorios, aunque el valor normal aceptado actualmente es de hasta 4,0 ng/ml.2 Su producción depende de la presencia de andrógenos y del tamaño de la glándula prostática.
Es importante remarcar que se trata de un indicador que nos ofrece sus valores a través de un simple análisis de sangre. Así mismo, también es importante tener en cuenta que no siempre un valor PSA elevado implica la presencia de un tumor maligno alojado en la próstata. En muchas ocasiones, otras afecciones más transitorias como la prostatitis mencionada anteriormente o la hiperplasia benigna de próstata pueden ser los causantes de una elevación de los niveles.
Por otra parte, sí es cierto que ante unos niveles elevados, su especialista optará por realizar otras pruebas para formular el diagnóstico definitivo que pueden ser desde un tacto rectal hasta una resonancia, intentando siempre que las pruebas invasivas sean la última opción. En este sentido, debemos tener claro que un PSA alto no implica directa ni necesariamente una intervención quirúrgica. Se trata de una primera prueba que servirá para detectar de forma rápida y «precoz» cualquier anomalía que nos haga seguir buscando el foco del problema.
Finalmente, nos gustaría también invitar siempre al paciente a mantener la calma ya que, incluso ante un diagnóstico positivo de cáncer de próstata, la intervención quirúrgica no es siempre la única acción ya que hay muchos tumores que únicamente requieren una vigilancia activa del mismo. Sin embargo, en caso de que la operación resulte el mejor tratamiento recomendado por su especialista, desde la Unidad de Cirugía Robótica San Rafael recomendamos la cirugía mínimamente invasiva con la que, gracias al Robot da Vinci y a nuestro equipo de profesionales, el paciente se puede beneficiar de múltiples ventajas como un periodo de hospitalización más corto, un menor sangrado durante la intervención y por tanto un menor dolor. Además, otras ventajas asociadas al Sistema Quirúrgico da Vinci son la mayor preservación de la continencia así como de la potencia sexual.
Os recordamos que nuestro equipo de cirujanos está formado por un grupo de profesionales pioneros que cuentan con reconocido prestigio a nivel nacional e internacional, lo que nos sitúa desde hace años como referencia en Cirugía Robótica en Madrid. Para cualquier duda o consulta, estaremos encantados de atenderos y responderemos a la mayor brevedad posible.