Hoy compartimos con vosotros un artículo sobre la historia de Palex Medical, los responsables de que podamos tener el robot da Vinci en España, y por supuesto también en la unidad de Cirugía Robótica del Hospital San Rafael.

 

Lo que comenzó como una compañía dedicada a la exportación de patatas y lechuga se ha ido convirtiendo a lo largo de ocho décadas de operaciones, en una de las empresas más importantes de distribución de tecnología médica entre los hospitales españoles.

Es la historia de Palex Medical, que debe su nombre a su actividad original: patatas, lechugas, exportación. Una compañía radicada en Sant Cugat del Vallés (Barcelona), que trabaja para dar otro salto cualitativo en su historia: la producción propia y la internacionalización.

La empresa fue creada en los años treinta por la familia de origen alemán Knuth, que exportaba patatas y lechugas a su país. Un tiempo después, entraron en contacto con empresarios de Sevilla que trabajaban con tripas de ganado, material con el que se hacían los hilos de sutura.

Poco a poco fue dirigiendo su actividad hacia este área, hasta que en 1955 se alía con la multinacional alemana B. Braun y empieza fabricar productos para esta en Rubí (Barcelona), al tiempo que la propia Palex aumentaba su portfolio de equipos para su distribución.

En 1992, Palex se independiza y continúa con su actividad importadora y distribuidora. “La definiría como una empresa referente de la distribución en el sector hospitalario en España y Portugal”, afirma el consejero delegado del grupo, Xavier Carbonell.

Y es que la compañía tiene su principal vía de negocio en la venta a los hospitales de España y Portugal de equipos “punteros e innovadores”. Introdujeron el primer corazón artificial, la primera válvula cardíaca o el primer sistema de hemodiálisis domiciliaria. “Estamos muy cerca del médico y conocemos muy bien sus necesidades. Apartir de ahí buscamos los productos que realmente demanda el mercado”, explica.

Palex se divide en diez unidades de negocio. “Tocamos muchos palos. Prácticamente estamos en todas las áreas que pueden encontrarse en un hospital”, señala. Prevé facturar más de 100 millones de euros este año, y Carbonell atribuye su buen posicionamiento en el mercado, en un sector muy competitivo y con empresas multinacionales, a la confianza que inspiran en los clientes: “Intentamos no solo vender producto, sino también dar el mejor servicio posible. Es lo que nos diferencia”.

Su principal base de usuarios son los hospitales públicos, que suponen el 75%. La crisis, que ha sido especialmente virulenta en el sector sanitario, también hizo mella en Palex. “Teníamos alguna comunidad autónoma pagando por encima de los mil días. Por suerte, gestionamos muy bien la tesorería, y tener una solidez y una cercanía con el cliente nos permitió encontrar financiación de forma relativamente fácil”, comenta.

Una situación que consiguieron superar. En 2013 adquieron una empresa especializada en tecnología de identificación por radiofrecuencia, lo que abrió una nueva etapa de crecimiento para la compañía, con la novedad de que, además de seguir distribuyendo, ha comenzado a fabricar sus propios productos.

“Nos hemos centrazo en la trazabilidad de la logística hospitalaria que consiste en el control y gestión de los stocks, de los activos de los hospitales, con el fin de reducir errores y tener un control exacto de qué y cuándo se administra a los pacientes”, precisa.

Xavier Carbonell destaca que ya han conseguido adjudicaciones para sus nuevos productos a nivel nacional, y poco a poco empiezan a distribuirlos a nivel internacional, uno de los ejes sobre los que quieren basar su crecimiento: “Buscamos alianzas con distribuidores de otros países para hacer llegar nuestro producto. Ahora vendemos en Reino Unido, Italia, Francia, Alemania, Turquía, Chile y Ecuador. Es en las zonas de habla hispana donde queremos ampliar el mercado”.

La estrategia internacional, expone el consejero delegado, tiene que ver con la crisis, pero también con el hecho de haber empezado a fabricar:“Si tienes un producto propio y ves que tiene salida, ¿por qué no hacerlo? Nos lo hemos planteado muy en serio, para que en cinco años sea una pata estratégica y podamos tener cierta diversificación”.

Eso requiere todavía una mayor inversión en I+D+i. Carbonell indica que dedican entre el 4% y el 5% de su facturación a este rubro. Por ahí llegará el crecimiento de Palex, que aún pertenece en un 100% a la familia fundadora.

 

Fuente: CincoDías